UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO 20240818

 

Cuando recitamos el Padre Nuestro, ¿Qué es lo que pedimos cuando decimos "danos hoy nuestro pan de cada día"? ¿Acaso no es que tengamos el pan y los otros medios materiales que necesitamos? ¿No es también que tengamos alimento para nuestros espíritus, por medio de la oración, y para nuestras mentes, por medio del estudio? ¿No es también que tengamos el pan que es la presencia de Dios que acompaña nuestra comunidad mientras caminamos al Reino de Dios? Es que la existencia cristiana toca todos los niveles de la vida, a saber, la física, la mental, la eclesial y otras. La vida cristiana, dicho de otra manera, debe ser católica en el sentido de universal, es decir, abarcar todas nuestras creencias; abrazar todos los niveles de la vida; y extenderse a todas las personas que buscan una vida auténtica.